Tuberías
Las tuberías son conductos por los que se transporta fluidos como el agua o gases combustibles.
Tuberías de agua fría, acs y calefacción
Dependiendo de la rugosidad interior de las paredes, existen tuberías para lisas y rugosas. En las tuberías de paredes lisas, a igual caudal hay menos pérdida de carga que en las rugosas, por lo que si se emplean estas últimas el diámetro de la tubería ha de ser superior.
Tuberías de metal
Si nos centramos en las tuberías de pared rugosa, pueden ser de acero galvanizado o de función dúctil.
Si la composición del agua lo permite, las tuberías de acero galvanizado son las más adecuadas para el abastecimiento de agua. Las de fundición dúctil, se usan principalmente en redes de abastecimiento y suelen ir con un recubrimiento de mortero de cementos que amortigua su rugosidad.
Las tuberías de cobre, de paredes lisas, se caracterizan por su gran facilidad de manipulación, ser muy maleable y tener una gran resistencia. Por el contrario, hay que tener en cuenta la aparición de corrosión debido a pares galvánicos con el acero.
Tuberías de acero inoxidable, tienen unas propiedades hidráulicas similares a los plásticos, pero tienen un elevado coste, por lo solo se utilizan en edificaciones de alta calidad.
Tuberías plásticas
Las tuberías plásticas se destacan por ser muy ligeras y por tanto manejables, proporcionan una pérdida de carga muy pequeña, tienen un buen comportamiento frente a las presiones habituales en instalaciones de edificios, resisten muy bien a los agentes químicos y a las incrustaciones de cal, su gran conformidad en caliente permite adaptarlas de forma sencilla a cualquier trazado. Además, se fabrican en diferentes colores, evitando así tener que pintarlas. Como puntos débiles: no resisten temperaturas superiores a 60ºC. y tiene un elevado coeficiente de dilatación.